Hasta ahora, las distintas soluciones que adoptaron las empresas para enfrentar los riesgos de contagio por la pandemia, eran anunciados como medidas temporales. Y el teletrabajo era uno de los tipos más recurrentes de alternativas tomadas por las firmas.

Hasta ahora.

Recientemente Sky Airline anunció su nuevo y permanente carácter home office, que implica que sus colaboradores no volverán a las oficinas corporativas, tanto en Chile como en Perú. Sabíamos que esta decisión ya la habían adoptado algunas pequeñas empresas, sector en que esta opción ya iba tomando cuerpo como tendencia. No obstante, que una firma como Sky Airline lo hiciera, marca un hito.

Las dificultades que enfrenta la industria aérea, producto de la caída en sus operaciones, llevó a la empresa, según se ha informado, a evaluar la situación laboral, revisando el funcionamiento del teletrabajo, el estado de los colaboradores y la eficiencia de la empresa. Y concretaron el cambio.

Lo que creo más interesante de este ejemplo, es que -junto con la evaluación previa y las consultas realizadas a los colaboradores-, no se dejó de lado algo fundamental: que hay instancias en el trabajo presencial que son irreemplazables en el teletrabajo.

En el caso de Sky Airline, por ejemplo, cada colaborador deberá asistir una vez a actividades sociales de la empresa y se podrán realizar reuniones presenciales de algunos equipos.

Pero hay otros temas que una empresa debe también considerar a la hora de tomar una decisión como esta, varios vinculados a sus colaboradores, como la jornada laboral. Lo fundamental, que en cierta forma abarca también lo anterior, es tener muy claro que el teletrabajo no sólo requiere soluciones tecnológicas sino también soluciones organizacionales, que conllevan cambios en el estilo de liderazgo de las jefaturas, del trabajo en equipo, de la comunicación con los colaboradores. Sin duda un gran desafío:

¿Están las empresas chilenas preparadas para una nueva mirada respecto de la confianza y control en las relaciones de trabajo?

Finalmente de lo que se trata es de abordar estos aspectos en forma prioritaria, ya que inciden directamente en la productividad, la calidad del trabajo y el compromiso con la empresa.